No hago el bien que quiero
Ahora soy m谩s libre y 隆puedo ir a confesarme m谩s f谩cilmente, sin tantas excusas que me creaba antes!
Es sorprendente ver la fortaleza que nos da el repetir estos actos, aunque nos parezcan muy chiquitos. As铆 como el vicio se hace de poquito en poquito y nos debilita, la voluntad se fortalece poco a poco 隆y nos impulsa cada vez m谩s a ser m谩s libres!